En octubre comenzaron las actividades extraescolares. Los pequeños príncipes van a dos, una deportiva y otra cultural. El deporte no puede faltar y más ahora que los niños salen poco de casa y a penas si ejercitan sus músculos corriendo y saltando como antaño. Elegimos la natación porque además de ser un deporte muy completo, saber nadar es una cuestión vital. Parece ser que hemos acertado, pasadas ya tres semanas a los peques se les ve contentos y disfrutan con su actividad. Elegimos la música poorque siempre les ha gustado, y además el planteamiento que tiene el lugar al que van nos pareció muy adecuado para su edad, las clases giran en torno al ritmo y el movimiento, los instrumentos los dejan para más adelante. Si con la natación acertamos con la música dimos en el clavo, van encantados y la disfrutan plenamente. Verles contentos nos ayuda a los papás a llevar mejor el agobio horario y el trajín que supone llevarles y traerles a las actividades.
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